Hospital Clínico Herminda Martín

Chillán, Martes 16 de Abril  2024

Noticias

Cirugía oftalmológica láser del HCHM se ubica entre las mejores innovaciones de salud

13 de diciembre de 2013

La cirugía oftalmológica con técnica láser para corregir la obstrucción lagrimal, que se realiza en el Hospital Clínico Herminda Martín de Chillán, fue reconocida entre las diez mejores innovaciones del año en el concurso Desafío Salud Gestiona, convocado por el Ministerio de Salud para distinguir aquellas iniciativas impulsadas por los hospitales públicos.

En una ceremonia encabezada por el Subsecretario de Redes Asistenciales, Luis Castillo, el equipo a cargo de la iniciativa en el centro asistencial recibió el reconocimiento que logró entre más de 300 propuestas de todos los servicios de salud del país que se presentaron a esta primera versión del concurso de innovación en salud.

La técnica fue reconocida por su eficacia terapéutica y alto impacto en la calidad de atención para uno de los problemas oftalmológicos más frecuentes en los adultos y que más lista de espera quirúrgica genera como es la obstrucción lagrimal. La función del sistema lagrimal es lubricar, proveer de oxígeno y cumplir con una labor antibacteriana para proteger al ojo.

Desde enero de este año esta afección se está resolviendo con cirugía láser mínimamente invasiva y en forma ambulatoria, beneficiando a la fecha a 140 pacientes.

Bastan sólo 15 minutos para corregir este problema oftalmológico, intervención que con la técnica convencional que se practicaba en el centro asistencial requería de una hora. Con la optimización del tiempo quirúrgico ha mejorado la eficiencia del uso de pabellón, la oportunidad con que se atiende al paciente y la reducción de la lista de espera en la especialidad de oftalmología.

La técnica consiste en generar un bypass entre el saco lagrimal y la fosa nasal, para subsanar los lagrimeos involuntarios que se producen cuando el saco está obstruido y también las infecciones a repetición, que requieren en muchas ocasiones de hospitalización, explica el oftalmólogo Raúl San Martín, uno de los especialistas que practica la técnica en el hospital de Chillán.

Un equipo combinado entre dos especialidades, otorrinolaringología y oftalmología, implementó este proceso que es ambulatorio y sólo utiliza anestesia local. El procedimiento convencional, en cambio, se practicaba con anestesia general y además requería de una incisión en la piel. Con la nueva técnica se utilizan los conductos naturales de la vía lagrimal para acceder a una zona profunda y por lo tanto se evitan cicatrices y hay menos riesgos para el paciente al ser mínimamente invasiva.

En la ceremonia de reconocimiento participó parte del equipo gestor de esta iniciativa integrado por: los médicos oftalmólogos Raúl San Martín y Marcelo Jiménez; la técnico de enfermería Marcela Vásquez; y las enfermeras Carolina Barriga e Isabel Henríquez.

Dentro de los Beneficios de la Cirugía Láser por sobre el uso de la técnica convencional se destaca un tiempo de intervención más reducido sólo 15 minutos en lugar de los 60 usados con la convencional; uso de anestesia local y no general; y sin requerir hospitalización como si era necesario en otros casos.

Detalles de la intervención

Luego del ingreso del paciente al pabellón quirúrgico, lo primero que hace el equipo médico es revisar la fosa nasal para ver si existe algún tipo de lesión en el tabique. Posteriormente, a través de una cámara endonasal, se graba desde la cavidad y se entuba desde los conductos lagrimales, con una sonda de fibra óptica que permite identificar desde fosa nasal cual es la posición y luego con el láser se vaporiza el hueso de la pared de tal manera que se pueda comunicar desde el saco lagrimal hasta la fosa nasal.

Una vez rota la pared lateral de la cavidad nasal, por ese conducto se instala una sonda de silicona, desde de la vía lagrimal a la fosa nasal, lo que permanecerá durante seis meses, para mantener una comunicación entre la vía lagrimal y la fosa nasal, dando tiempo para que la herida en el hueso cicatrice. Cumplido este tiempo, se retiran los tubos y quedan los conductos formados. “Así existe una comunicación amplia y eficiente del saco lagrimal a la fosa nasal, a través de un conducto alternativo”, explica el oftalmólogo Marcelo Jiménez.

Según el facultativo, “la nueva comunicación entre el lagrimal y la fosa nasal permite que el paciente deje de tener lagrimeo, porque va a drenar y no va a tener infecciones de repetición, las que habitualmente son muy incómodas, y motivan múltiples hospitalizaciones”.

Comparte en

Acreditación de Prestadores
Institucionales de Salud

Hospital Clínico Herminda Martín

Francisco Ramírez 10, Chillán - Región de Ñuble - Chile
Teléfono +56 42 2586400