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Inician las pruebas del primer angiógrafo de la red pública en el nuevo Hospital Regional de Ñuble
28 de noviembre de 2025
La habilitación del angiógrafo se enmarca en la creación de la nueva Unidad de Hemodinamia, que permitirá realizar procedimientos diagnósticos y terapéuticos intravasculares directamente en la Región.
El nuevo Hospital Regional de Ñuble inició las pruebas del primer angiógrafo de la red pública en la región, un equipamiento de última generación que transformará la atención de enfermedades cardiológicas, cerebrovasculares, vascular periférica y otras condiciones de alta complejidad.
La incorporación de este equipo forma parte de la implementación de la nueva Unidad de Hemodinamia, que permitirá realizar intervenciones como angioplastías coronarias, trombectomías cerebrales, nefrológicas y procedimientos de radiología intervencional sin necesidad de trasladar a los pacientes fuera del territorio.
De acuerdo con el Dr. Paulo Narváez, cardiólogo y hemodinamista en formación del Hospital Clínico Herminda Martín (HCHM), este avance marcará un antes y un después en la atención regional. “Este es el primer angiógrafo de la red pública en Ñuble y representa un salto histórico. Reducirá tiempos de espera, mejorará la oportunidad de atención y permitirá resolver patologías prevalentes sin trasladar a nuestros pacientes a otras regiones. Lo que antes podía tardar horas o días, ahora podrá resolverse de manera inmediata o en plazos mucho más breves”.
Se estima que al menos 2.000 personas al año podrán recibir atención en la propia región, fortaleciendo la oportunidad de mejorar el pronóstico de emergencias como infartos agudos al miocardio o ataques cerebrovasculares, tratamiento y secuelas.
El Dr. Narváez añade que la puesta en marcha de la unidad implica un desafío relevante en materia de preparación clínica: “Los desafíos son enormes, pero profundamente motivadores. Estamos formando equipos multidisciplinarios, desde cardiología, neurología, neuroimagen e incorporando equipamiento y técnicas que no existían en el hospital. Es un cambio completo en la forma de trabajar, pero estamos plenamente comprometidos con construir la Unidad de Hemodinamia que Ñuble merece”.
Un avance decisivo para la región
Por su parte, el Dr. Alexis Rojo Araya, jefe del Servicio de Neurología del HCHM, destacó el impacto que tendrá este equipamiento en la reducción de discapacidad y mortalidad:
“Las patologías cardiocerebrovasculares son la segunda causa de muerte en Ñuble y comparten factores de riesgo muy frecuentes en nuestra población, como hipertensión, dislipidemia y diabetes. En muchos casos, los tratamientos médicos no son suficientes y se requieren intervenciones mecánicas que solo un angiógrafo puede realizar. Este equipo permite tratar vasos coronarios y cerebrales de manera mínimamente invasiva, mejorando el pronóstico, reduciendo la discapacidad y aumentando la sobrevida. Contar con tecnología de este nivel en Ñuble, en una región con alta incidencia de estas patologías, es realmente un sueño hecho realidad para nuestros pacientes”.
El Dr. Max Besser Valenzuela, subdirector de Gestión Asistencial del Servicio de Salud Ñuble, relevó la trascendencia de la iniciativa: “Contar con un angiógrafo de este nivel en Ñuble transforma completamente nuestra capacidad resolutiva. Permitirá diagnósticos y tratamientos oportunos, disminuirá la discapacidad asociada a patologías tiempo-dependientes y mejorará de manera sustancial la calidad de vida de nuestras usuarias y usuarios. Es un paso gigantesco para la salud pública de la región”.
El angiógrafo permitirá diagnosticar y tratar el sistema vascular de manera integral: arterias coronarias, vasos cerebrales, territorios abdominales y extremidades, entre otros. Su capacidad para visualizar en tiempo real la anatomía vascular y resolver obstrucciones mediante intervenciones precisas fortalecerá la respuesta regional ante emergencias cardiovasculares y neurovasculares.