Los trastornos temporomandibulares (TTM) se clasifican como un conjunto de patologías que pueden afectar a una o ambas articulaciones temporomandibulares, músculos que controlan la función de la mandíbula y estructuras asociadas.
La especialista en TTM de nuestro Hospital, Dra. Nicole Maureira, explicó que las personas deben consultar en su centro de salud familiar para una evaluación odontológica, cuando sienten “«dolor en el alguna zona del rostro, cuando este no se asocia a una causa dental, sensación de rigidez o se traba la mandíbula, sonidos dolorosos al abrir o cerrar la boca, o un cambio en la forma en que muerden los dientes superiores con los inferiores, entre otros. Luego de esa primera evaluación en la atención primaria, el usuario será derivado al Centro Ambulatorio de Especialidades, donde lo atenderemos y trataremos su patología”.
La odontóloga comentó que recientemente la Unidad de Especialidades Odontológicas comenzó un programa de teleconsulta inicial para pacientes que esperaban una atención por este tipo de problemas orales. “En esta primera consulta por video llamada, se evalúa la condición de la personas mediante una entrevista y luego le agendamos una cita presencial, a la que en muchas ocasiones las usuarias y usuarios llegan con los exámenes necesarios para iniciar su tratamiento en un corto plazo. De esta manera, evitamos las ausencias de las personas a sus lugares de trabajo o estudio y se optimizan los viajes al hospital para el momento de tomar exámenes o iniciar el tratamiento, transformándose en un importante beneficio sobre todo para quienes residen en zonas rurales alejadas de Chillán. Por otra parte, los pacientes pueden resolver dudas respecto a su condición, pues la atención es realizada por el mismo especialista que le atenderá posteriormente de forma presencial”.
Desde abril a junio 70 personas han sido atendidas por algunas de estas patologías en el HCHM, de las cuales un 68%, fueron mediante teleconsulta. La resolutividad de esta estrategia es del 95,5%, lo que permitió reducir la tasa de ausencias a primeras consultas de un 40% a un 4,5%.